El marketing es también para las pequeñas empresas. La estrategia de marketing no depende del tamaño de la empresa sino de los medios que se disponga para alcanzar los objetivos propuestos. Hay que ser realista a la hora de definir esos objetivos, y fijarse unas metas a corto, medio y largo plazo.
A veces se cae en le error de considerar el marketing como un gasto de gestión, pero lejos de esta idea el marketing en realidad es una inversión.
El marketing engloba el plan estratégico del negocio y por tanto es una apuesta de toda la compañía para la obtención de los objetivos marcados.
La Pymes suele tener miedo al marketing porque no disponen de una estructura que incluya este departamento, pero como en otros casos, este departamento puede estar perfectamente externalizado y dejarse en manos de profesionales que les ayuden a definir y ejecutar el plan estratégico de la compañía.
Hoy en día la inversión en marketing no consiste en disponer de una cantidad enorme de dinero para campañas. Las nuevas tecnologías, internet, las redes sociales son herramientas que se utilizan como una nueva manera de hacer marketing basándose en la creatividad y originalidad (ver nuestro post: marketing de guerrilla) lo que hace posible alcanzar la máxima rentabilidad de la inversión realizada.
La estrategia de marketing no sólo son campañas publicitarias, es también la imagen corporativa, el trato al cliente, el trabajo profesional,…, y esto lo tienen también las pequeñas empresas.